Vistas de página en total

sábado, 19 de septiembre de 2015

Cuando lo das todo y no recibes nada.

Hola a todos, escribo ésta entrada porque me encuentro en ese momento, como bien dice el titulo de ésta entrada. A continuación voy a explicar cómo solucionarlo:
A menudo nos pasa que lo damos todo para inocentemente recibir lo que nos merecemos, cuando en realidad recibimos poco o nada. 
Personalmente cuando ésto me ocurre pienso que si no he llegado a lo que quiero es porque no me lo merezco, porque aun no he dado todo lo que debía de dar para recibir aquello que me merecía. Es cierto que esto puede ser frustrante, y lo es, pero no podemos dejarnos ganar cuando ya hemos llegado tan lejos. No podemos tirar todo el trabajo hecho por la borda, hay que continuar hasta el final. Si el final no es el que te mereces, es porque todavía no es el final.
Otro de los factores que nos llevan a esto es pensar que lo que queremos tenemos que conseguirlo en un periodo corto de tiempo, cuando en realidad las grandes cosas conllevan mucho tiempo y mucho trabajo.
Con ésto acabo, solo decir que si os encontráis en ésta situación (como yo ahora) no os dejéis llevar por la negatividad, piensa bien lo que quieres. Recuerda que si fuera sencillo cualquiera lo haría.  
Sólo hay que seguir, el futuro y el tiempo te recompensará como nadie podrá hacerlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario